el impacto de la crisis en la cadena de abastecimiento en la industria productiva.

Cuando estalló la pandemia, la escasez de la cadena de abastecimiento solo tardó unos días en afectar a las fábricas de todo el mundo. Incapaces de conseguir los materiales necesarios, muchas organizaciones no tuvieron más remedio que ralentizar, o incluso detener, la producción. Estas interrupciones en la cadena de abastecimiento provocaron un efecto dominó que dejó las estanterías de los comercios vacías y a los consumidores luchando por encontrar los productos que necesitaban.

A pesar de que la pandemia terminó, sigue habiendo interrupciones en la cadena de abastecimiento. Muchos expertos coinciden en que la escasez de la cadena de abastecimiento podría durar al menos otros dos años, si no más. Como fabricante, ya sabés que esperar a que las cosas mejoren no es suficiente. Ahora es el momento de examinar los procesos actuales de tu cadena de abastecimiento y reforzar tus redes actuales.

Sin embargo, antes de iniciar este proceso, es importante comprender las razones que subyacen a las actuales interrupciones de la cadena de abastecimiento, así como el impacto específico de esta crisis en la industria manufacturera. En este artículo se analiza en detalle el impacto de esta crisis en la industria manufacturera.

¿Qué es la escasez en la cadena de abastecimiento?

La cadena de abastecimiento es la columna vertebral de la industria manufacturera. Es el proceso de asegurar las piezas, los bienes y las materias primas necesarias para completar la producción de bienes y productos específicos. La cadena de abastecimiento en la industria productiva es extremadamente compleja. Incluye la creación de redes con varios proveedores y la gestión de los procesos de envío y entrega.

Una escasez en la cadena de abastecimiento está causada por una o más interrupciones en estos procesos. Las interrupciones no son un reto nuevo para los fabricantes. Lo que sí es nuevo, sin embargo, es la cantidad de interrupciones que afectan a múltiples puntos del proceso en forma simultánea. Estas interrupciones, a su vez, causaron un efecto dominó que acabó afectando a casi todas las plantas del mundo.

¿Por qué se da esta escasez?

Como ya se ha dicho, la escasez de la cadena de abastecimiento no es un problema nuevo para la industria manufacturera. En su mayor parte, las empresas han aprendido a mitigar las pequeñas interrupciones sin causar grandes retrasos en la producción. Aunque la pandemia disparó este problema, la realidad es que los retos de la cadena de abastecimiento son más complejos y no se limitan a uno solo. Principales causas:

Escasez de talentos

La Organización Internacional del Trabajo de la ONU afirma que, si se tiene en cuenta tanto la reducción de la jornada laboral como la pérdida real de puestos de trabajo, se produjo una pérdida total de 255 millones de empleos en todo el mundo debido a la pandemia y un descenso del 4,4% del producto interior bruto mundial durante la pandemia.

Hoy en día, la industria manufacturera sigue enfrentándose a una importante escasez de mano de obra y no se espera que termine en un futuro próximo. De hecho, la Asociación Nacional de Fabricantes predice que más de 2 millones de puestos de trabajo en el sector no estarán cubiertos en 2030 solo en Estados Unidos. Para agravar aún más la situación, la creciente falta de personal calificado les está dificultando aún más a los fabricantes encontrar a los trabajadores que necesitan para integrar adecuadamente la tecnología de la cadena de abastecimiento que contribuya a agilizar sus procesos.

De hecho, la Asociación Nacional de Fabricantes predice que más de 2 millones de puestos de trabajo en el sector manufacturero quedarán sin cubrir de aquí a 2030 sólo en Estados Unidos.

Por ejemplo, la escasez de mano de obra en las refinerías de todo el mundo dificulta el abastecimiento de materias primas como el cobre, el zinc y el hierro. La importante escasez de mano de obra en el sector del transporte también les está costando a los fabricantes obtener los suministros que necesitan y entregarle los productos finales al consumidor.

Funcionando casi al límite de su capacidad

En los últimos años, hubo una tendencia en la industria manufacturera que consistió en almacenar físicamente menos inventario in situ y, en su lugar, depender de la red de abastecimiento para entregar los suministros según sea necesario. Este modelo de funcionamiento casi al límite de la capacidad les permite a las organizaciones ahorrar dinero, reducir los residuos y mejorar la eficiencia en el proceso de abastecimiento.

En su mayor parte, este modelo de negocio funcionó bien y las organizaciones pudieron asegurarse los materiales que necesitaban cuando los necesitaban. La escasez de la cadena de abastecimiento solía limitarse a un tipo de material o a una región concreta y los fabricantes podían encontrar soluciones alternativas para minimizar los retrasos en la producción.

Cuando llegó la pandemia, todo cambió. Tanto la producción como el transporte de materias primas y de suministros se detuvieron o se atrasaron considerablemente. Debido a las limitaciones de stock in situ, muchos fabricantes se encontraron con graves carencias en cuestión de días o semanas.

Para superar este reto, los fabricantes tomaron medidas para aumentar sus inventarios in situ. Estas empresas tuvieron que buscar soluciones de almacenamiento fiables para este aumento en medio de una pandemia mundial.

Falta de diversificación de las redes de abastecimiento

Los fabricantes mantienen redes de cadena de abastecimiento muy complejas y de varios niveles para abastecerse de los materiales necesarios para la producción. Naturalmente, la mayoría de las empresas buscan proveedores rentables que ofrezcan los materiales de calidad que desean. A medida que la industria logística se fue entrelazando a escala mundial, cada vez más fabricantes empezaron a contar con proveedores nacionales e internacionales, lo que funcionó bien hasta que llegó el COVID-19.

Los cierres fronterizos interrumpieron parte del comercio internacional, lo que les imposibilitó a los fabricantes obtener los materiales necesarios para la producción. Incluso algunas opciones de comercio nacional se vieron interrumpidas debido a la preocupación por el COVID-19. Durante este tiempo, los fabricantes tuvieron que esforzarse por encontrar proveedores locales y regionales alternativos para llenar el vacío. En algunos casos, esto no fue posible, lo que detuvo la producción por completo.

Por ejemplo, la escasez de chips semiconductores provocó importantes retrasos en la producción de las industrias automotriz y electrónica. De hecho, un estudio reciente reveló que la industria automotriz mundial perdió hasta 110.000 millones de dólares debido a esto en 2021.

A medida que el comercio nacional e internacional comienza a estabilizarse tras la pandemia, el 93% de los líderes de la cadena de abastecimiento afirman estar comprometidos con la creación de redes más flexibles y resistentes.

¿Cómo afecta la crisis en la cadena de abastecimiento a los fabricantes?

La crisis actual en la cadena de abastecimiento no solo está frustrando a los fabricantes mundiales, sino que también está afectando significativamente a estas empresas de diversas maneras:

Tiempos de producción más largos

Sin duda, las interrupciones en la cadena de abastecimiento están prolongando los plazos de producción de los fabricantes, lo que resulta costoso y requiere mucho tiempo. Si las empresas no pueden conseguir las materias primas que necesitan, podrían no tener más remedio que detener la producción hasta que les lleguen los suministros necesarios.

Parte del problema es la incapacidad de los fabricantes en prever sus necesidades futuras. Para que la producción se desarrolle sin problemas, los fabricantes deben saber con precisión qué suministros necesitan y cuándo los necesitan. No disponer de esta información puede dificultar el abastecimiento rentable de la empresa.

La realidad es que vivimos tiempos sin precedentes y las demandas de los consumidores fluctúan con tanta rapidez que a las empresas les resulta difícil seguirles el ritmo. A los fabricantes que siguen haciendo cuentas con hojas de cálculo obsoletas para gestionar sus redes y los procesos de la cadena de abastecimiento puede resultarles difícil, o incluso imposible, prever con exactitud las necesidades futuras.

Afortunadamente, la tecnología de la cadena de abastecimiento ha avanzado mucho en los últimos años. De hecho, la tecnología adecuada puede mejorar la capacidad de los fabricantes para prever necesidades futuras y ayudarlos a gestionar mejor las redes de su cadena de abastecimiento.

Costos más elevados

Los estudios revelan que la crisis actual en la cadena de abastecimiento podría costarles a las empresas hasta el 45% de sus ingresos anuales en el transcurso de 10 años. Algunas de estas pérdidas se deben al aumento de los costos de materiales y de los costos operativos.

En primer lugar, el aumento de la demanda de determinados suministros, como los semiconductores mencionados anteriormente, combinado con la preocupación por la inflación, ha disparado los costos de los materiales. Aunque los fabricantes pueden trasladar algunos de estos gastos añadidos al consumidor, existe un peligro real de sobrevalorar los precios para su cliente objetivo.

En segundo lugar, los tiempos de producción más largos y el aumento de los salarios también están incrementando el costo total de producción. La industria manufacturera experimentó un aumento salarial del 6% en 2021. Aunque esto pueda no parecer mucho, en un momento en el que las empresas intentan controlar los costos, cualquier tipo de aumento salarial es difícil de gestionar.

Por último, el conflicto entre Rusia y Ucrania ha provocado un aumento de los costos en el surtidor de nafta. Para los fabricantes, ese aumento se traduce en mayores costos de transporte de los productos y de los materiales que entran y salen de la fábrica.

Menor satisfacción del cliente

Un estudio reciente revela que el 57% de los consumidores se han visto personalmente afectados por la escasez en la cadena de abastecimiento. Este estudio también muestra que el 52% de los consumidores planea abstenerse de comprar productos enviados desde el extranjero y el 36% los buscaría en otra parte si tuviera que esperar más de dos días para recibir sus productos.

Se trata de una noticia preocupante para los fabricantes, que siguen luchando contra las múltiples interrupciones en la cadena de abastecimiento. La incapacidad de suministrarles a los consumidores los productos que desean a tiempo podría hacerles perder clientes. Los fabricantes que no logren mitigar el impacto de la crisis actual corren un riesgo real de perder su negocio.

¿Qué medidas están tomando los fabricantes para superar este reto?

Los fabricantes que esperan seguir siendo competitivos en los próximos años deben tomar medidas ahora para mejorar la eficiencia de su cadena de abastecimiento. Damos acá un rápido vistazo de algunos pasos que los fabricantes están dando para superar estos retos.

Mejorar la tecnología de la cadena de abastecimiento

Las hojas de cálculo Excel ya no son una forma eficaz de gestionar los procesos de abastecimiento. La realidad es que estas redes y las demandas de los consumidores se volvieron demasiado complejas para ser gestionadas manualmente. De hecho, los estudios revelan que las empresas con más éxito tenían 2,5 veces más probabilidades de invertir en tecnología de la cadena de abastecimiento y análisis avanzados. Las empresas que quieran sobrevivir en el mercado actual deben considerar seriamente la posibilidad de actualizar los procesos actuales de su a cadena de abastecimiento para incluir tecnología avanzada.

Mejorar la estrategia de contratación

Los fabricantes deben ser capaces de cubrir los puestos vacantes tanto a nivel ejecutivo como en la planta. Lamentablemente, la escasez de mano de obra y la creciente falta de cualificación tornan este paso extremadamente difícil para los fabricantes. De hecho, el 78% de los empresarios consideran que conseguir talento es su mayor reto para 2022. Las empresas deben desarrollar prácticas de contratación sólidas capaces de identificar y de atraer al talento calificado que necesitan, tales como tener una marca empleadora fuerte, invertir en tecnología en RRHH y desarrollar un programa de retención integral.

Por ejemplo, invertir en trabajadores eventuales puede ayudar a tu empresa a reclutar el talento que necesita en medio de un mercado laboral altamente competitivo. De hecho, los trabajadores eventuales pueden permitirle a tu empresa ampliar y reducir su personal según sea necesario para satisfacer las demandas de producción en un entorno de mercado cambiante. Los equipos de Randstad pueden ayudarte en este proceso. Proporcionamos servicios integrales y podemos encargarnos de todo, desde la contratación de los trabajadores eventuales hasta la organización de turnos en función de las necesidades específicas de tu empresa.

Invertir en la formación de los empleados

Con el aumento de la demanda de tecnología para la cadena de abastecimiento, también aumenta la demanda de trabajadores cualificados para la gestión de este software. A las empresas les puede resultar imposible conseguir esos talentos únicamente mediante la contratación. Para superar este obstáculo, muchos fabricantes están tomando medidas para capacitar a sus trabajadores actuales para que adquieran las competencias tecnológicas que la empresa necesita tanto ahora como en el futuro. Por ejemplo, los trabajadores con experiencia en la utilización de software de gestión de inventarios y sistemas de gestión de almacenes están muy solicitados. Los empresarios también buscan candidatos con experiencia en el análisis de datos y que tengan habilidades interpersonales, tales como el pensamiento crítico y la capacidad de adaptación, que demuestren aptitud para el aprendizaje.

Crear una red diversificada de cadenas de abastecimiento

Si la pandemia puso de manifiesto algún aspecto problemático, fue la falta de redes de abastecimiento diversificadas. Los fabricantes que dependían en gran medida de proveedores internacionales y nacionales se encontraron atrapados cuando se cerraron las fronteras. Para evitar que esto vuelva a ocurrir, el 90% de los fabricantes se han comprometido a crear una red de proveedores diversificada que incluya proveedores locales y regionales.